Calefacción y Refrigeración Renovables
La nueva Directiva 2018/2001 relativa al fomento del uso de energía procedente de fuentes renovables, que entró en vigor el pasado 24 de diciembre, tiene en cuenta, al igual que la anterior, la energía aerotérmica y la hidrotérmica, pero con una importante diferencia de terminología, ya que la versión actual enmarca las mencionadas energías renovables dentro de la denominación de “Energía Ambiente”, sin mencionar expresamente los términos “aerotermia” e “hidrotérmia”.
DIRECTIVA 2018/2001 en afec.es
En base a ello, esta Directiva define la "energía ambiente" como la energía térmica presente de manera natural y la energía acumulada en un ambiente confinado, que puede almacenarse en el aire ambiente (excluido el aire de salida) o en las aguas superficiales o residuales.
Los aspectos más relevantes de este texto legislativo, para el sector de la climatización, son:
- Establece un objetivo vinculante de la Unión de una cuota de, al menos, un 32% de energías renovables del consumo final bruto de energía de la UE en 2030.
- Tiene en cuenta la energía ambiente y la energía geotérmica, utilizadas para calefacción y refrigeración mediante bombas de calor y sistemas urbanos de refrigeración, a efectos del consumo final bruto de energía procedente de fuentes renovables en el sector de calefacción y refrigeración, siempre que la producción final de energía supere de forma significativa el insumo de energía primaria necesaria para impulsar la bomba de calor.
- Apoya, entre otras posibilidades, tecnologías como las bombas de calor, para garantizar que las medidas nacionales para el desarrollo de la calefacción y la refrigeración renovables se basen en un completo cartografiado y análisis del potencial nacional en materia de energía renovable y de energía residual.
- Considera que el sector de la calefacción y de la refrigeración es clave para acelerar la descarbonización del sistema energético, dado que representa cerca de la mitad del consumo final de energía de la Unión, además de ser un sector estratégico en términos de seguridad energética, ya que se prevé que cerca del 40% del consumo de energías renovables en 2030 proceda de la calefacción y la refrigeración.
- Menciona que las deficiencias de información y formación deben subsanarse, especialmente en el sector de calefacción y refrigeración, con el fin de acelerar el desarrollo de la energía procedente de fuentes renovables.
- Además de contemplar la cantidad de calor, también contempla la cantidad de frío procedente de las bombas de calor que se ha de considerar como energía procedente de fuentes renovables, mencionando que se calculará de conformidad con la metodología establecida en su anexo VII y tendrá en cuenta el uso de energía en todos los sectores de uso final.
- Establece que, a más tardar el 31 de diciembre de 2021, la Comisión adoptará actos delegados, con el fin de completar la presente Directiva estableciendo una metodología para calcular la cantidad de energía renovable utilizada para la refrigeración y la refrigeración urbana y para modificar el anexo VII. Esa metodología incluirá factores de rendimiento estacional mínimos para las bombas de calor que operan en modo reversible.